Época: Bliztkrieg
Inicio: Año 1940
Fin: Año 1940

Antecedente:
La invasión de Holanda y Belgica

(C) Andrés Ciudad y María Josefa Iglesias



Comentario

Si en el lado alemán el espíritu ofensivo aumentaba constantemente, en el aliado, especialmente en el francés, disminuía, si es que había existido alguna vez desde 1939, y la mentalidad defensiva, cuyo símbolo era la línea Maginot iba a hacer mella en la moral, que cada vez será más baja, sobre todo en la zona de Sedán.
La Linea Maginot sólo protegía la frontera franco-alemana, pero no la franco-belga, ni la franco-suiza, ni la franco-italiana. Por otro lado, el general Gamelin, comandante en jefe francés, disponía de une ejército, escasamente móvil, anticuado, pero, poseía mayor número de carros de combate -3.600 y algunos mejores que los alemanes-. Pero la doctrina francesa obligaba a que se empleasen dispersos, como apoyo a la infantería o para taponar rupturas del frente, ignorando, sin duda, lo que los alemanes habían hecho en Polonia -y lo que estaban haciendo en Noruega con los paracaidistas y tropas aerotransportadas-.

La aviación francesa era de calidad mediocre y disponía de pocos bombarderos (242 sobre 1.700 aviones), pero esto era secundario para Gamelin, anciano general anticuado. Francia disponía de 96 divisiones, incluidas las de la línea Maginot, en el frente norte.

En Francia, los británicos disponían de 9 divisiones largas, pero de pocos aviones y carros (288). Y había una división polaca.

Los aliados pretendían detener a los alemanes en Bélgica, para que no sufriera daños el territorio francés y para que se les unieran con facilidad las tropas belgas (y si era posible, las holandesas), pues por sí solas éstas poco podían hacer En cuanto los belgas pidieran ayuda, se pondrían en marcha la llamada Maniobra Dyle, y el ala izquierda francesa -general Billote- entraría en Bélgica y se situaría sobre la línea Amberes-Mosa, para respaldar al ejército belga si se retiraba. A esta operación se le añadió otra más arriesgada: la llamada Variante Breda, que debería conducir al VII Ejército francés del general Giraud hasta el centro de Holanda, para enlazar con el ejército de este país. La Maniobra Dyle debería permitir amenazar el Rhur alemán, importante zona industrial. Y así se hará, pese a la oposición del general Georges, que temía, como ocurrió, un debilitamiento de las reservas francesas, y pese a que esto dejaba un punto débil en las líneas aliadas en Sedán, precisamente por donde iban a atacar los alemanes.

La Maniobra Dyle era un plan un poco precipitado, mal concebido; no se había previsto lo que tardarían en llegar los alemanes, ni lo que resistirían belgas y holandeses, y, naturalmente, todos seguían pensando en el Plan Schlieffen. Con las tropas holandesas y belgas los aliados sumarían 137 divisiones, contra las 136 alemanas. Es decir, ambos bandos estaban igualados.

Las fuerzas aliadas -británicos y franceses- situadas en este área se encontraban dispuestas en la siguiente forma, de izquierda a derecha: VII Ejército francés -general Giraud-; BEF o Cuerpo Expedicionario Británico -general Gort-; I Ejército francés -general Blanchard-; IX Ejército francés -general Corap-; y finalmente, II Ejército francés -general Huntziger-. Las fuerzas francesas integraban el Primer Cuerpo de Ejército, al mando del general Billotte. El conjunto de todos los Ejércitos aliados -francés, belga, holandés y fuerza expedicionaria británica- estaba comandado por el general Georges.